El juicio penal del expresidente Donald Trump por falsificar documentos para silenciar a una actriz porno y proteger su carrera presidencial en 2016, tiene al juez Juan M. Merchan a cargo. En este proceso, la defensa pidió al jurado no enviar a Trump a la cárcel, solicitud que el juez consideró inapropiada y ordenó ignorar. Durante los argumentos finales, el abogado principal de Trump, Todd Blanche, cuestionó la credibilidad del testigo estrella de la Fiscalía, Michael Cohen, exabogado de Trump.
Trump es el primer exmandatario de Estados Unidos en ser juzgado en un proceso penal, enfrentando 34 delitos graves de falsificación de registros comerciales. Si es encontrado culpable, podría ser sentenciado a libertad condicional o cuatro años de prisión. Tras los argumentos finales de la defensa, el turno es para la Fiscalía, que deberá convencer al jurado de la culpabilidad del expresidente. El juez Merchan calificó el comentario de la defensa como "escandaloso" y señaló la experiencia del abogado, considerando difícil que haya sido accidental.
Una vez que el jurado se retire para deliberar, deberá llegar a un veredicto por unanimidad. En caso de no lograr un consenso, el juicio podría ser declarado nulo. La duración de los alegatos finales de la Fiscalía se estima en unas cuatro horas y media, donde buscarán demostrar la culpabilidad de Trump en los delitos que se le imputan. Este proceso judicial ha generado una gran atención mediática y política, debido a la relevancia del acusado y la gravedad de los delitos que se le imputan.
El caso se centra en las acusaciones de falsificación de documentos para silenciar a una actriz porno y proteger la campaña presidencial de Trump en 2016. Con Michael Cohen como testigo estrella de la Fiscalía, la credibilidad de este se ha convertido en un punto clave en el juicio. La defensa ha cuestionado repetidamente la veracidad de las declaraciones de Cohen, buscando desacreditarlo ante el jurado y obtener un veredicto de "no culpable" para Trump.
El proceso judicial contra Trump ha sido seguido de cerca tanto en Estados Unidos como a nivel internacional, debido a la repercusión política que podría tener en el país. El hecho de que un exmandatario enfrente un juicio penal por graves delitos de falsificación de documentos ha generado un gran interés mediático. La decisión final del jurado será crucial y determinará el futuro legal de Trump, quien se enfrenta a la posibilidad de ser condenado a prisión en caso de ser encontrado culpable. La recta final del juicio se espera con gran expectación, con la Fiscalía buscando demostrar la culpabilidad del expresidente y la defensa defendiendo su inocencia.