El número de linces ibéricos adultos se ha multiplicado por diez en lo que va de siglo, lo que ha permitido que deje de ser considerado como "en peligro" y mejore su estatus a "vulnerable" en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). La población de linces ibéricos ha experimentado un incremento significativo, pasando de 62 ejemplares adultos en 2001 a 648 en 2022, lo que demuestra que los esfuerzos de conservación han tenido éxito. La directora general de la UICN, Grethel Aguilar, destacó que esta mejora en el estatus del lince ibérico demuestra que las labores de conservación pueden dar resultados positivos.
La población total del lince ibérico, incluyendo ejemplares jóvenes y adultos, se estima en más de 2.000 individuos, según la UICN. La Lista Roja de la UICN clasifica a las especies en tres niveles de riesgo: "bajo riesgo", "amenazado" y "extinto", con subniveles dentro de cada grupo. Dentro de la categoría de especies amenazadas, el lince ibérico pasará de estar en peligro a ser considerado vulnerable, lo que significa que corre un menor riesgo de extinción, pero aún enfrenta diversos problemas como la pérdida de hábitat, el cambio climático, los atropellos y la caza furtiva.
A pesar de la mejora en su estatus, la población del lince ibérico sigue enfrentando amenazas como la alteración de su hábitat debido al cambio climático, los atropellos y la caza furtiva, según advierte la UICN. Además, la enfermedades transmitidas por gatos domésticos y las fluctuaciones en la población de conejos, su principal fuente de alimento, también representan riesgos para esta especie. Es importante seguir supervisando a los linces ibéricos para garantizar su capacidad reproductiva y de supervivencia a largo plazo.
La Lista Roja de la UICN incluye un total de 44.000 especies animales y vegetales, de las cuales aproximadamente el 28% están en peligro de extinción. Entre los mamíferos más amenazados se encuentran el camello salvaje, el visón europeo, el gorila (tanto en su subespecie oriental como occidental), el rinoceronte de Java y el orangután de Sumatra. La conservación de estas especies es crucial para preservar la biodiversidad y el equilibrio de los ecosistemas.
En general, la mejora en el estatus del lince ibérico es un logro significativo en términos de conservación de especies en peligro de extinción. Gracias a los esfuerzos continuos de conservación, la población de linces ha experimentado un notable crecimiento en las últimas décadas, pasando de estar al borde de la extinción a ser considerado vulnerable. Sin embargo, es fundamental seguir trabajando para proteger a esta especie emblemática y asegurar su supervivencia a largo plazo.