El papa Francisco hizo un llamado a la comunidad internacional para que no se permita que los ucranianos mueran de frío durante el invierno, debido a la falta de energía y ayuda alimentaria. Durante el rezo dominical del Ángelus, expresó su preocupación por los ataques aéreos contra la población civil en Ucrania, instando a que cese la violencia y se detenga el derramamiento de sangre de inocentes. Se reunió con el presidente ucraniano Volodomir Zelenski y el líder de la Iglesia greco-católica de Ucrania, Sviatoslav Shevchuk, quienes le informaron sobre la grave situación humanitaria en el país.
En su encuentro con el presidente ucraniano, Francisco y Zelenski discutieron la guerra en Ucrania, un conflicto en el que el Vaticano ha estado involucrado en la búsqueda de una solución y en tareas de mediación. Esta implicación ha tenido resultados positivos, como la liberación de dos sacerdotes de la Iglesia greco-católica de Ucrania por parte de Rusia. El Gobierno de Ucrania ha instado a la población a estar preparada para cualquier escenario durante los meses fríos debido a los continuos ataques del Ejército ruso, ya que las temperaturas invernales en el país oscilan entre -4,8°C y 2°C.
El pontífice enfatizó la importancia de proteger a los civiles en medio del conflicto, que suelen ser los más afectados por la violencia. Francisco destacó la necesidad de proporcionar ayuda humanitaria urgente a la población ucraniana para evitar que sufran las consecuencias del frío extremo y la falta de recursos básicos. Su llamado a la comunidad internacional busca sensibilizar sobre la urgencia de la situación en Ucrania y movilizar recursos para brindar asistencia a quienes lo necesitan.
La Iglesia católica ha estado activamente involucrada en la mediación y la búsqueda de soluciones pacíficas en Ucrania, apoyando los esfuerzos por detener la violencia y lograr una resolución pacífica al conflicto. El papa Francisco ha mantenido reuniones con líderes ucranianos para abordar la crisis humanitaria en el país y buscar formas de ayudar a mitigar el sufrimiento de la población. Su compromiso con la paz y la solidaridad internacional se refleja en su llamado a la comunidad mundial para que tome medidas urgentes en apoyo a Ucrania.
La situación en Ucrania se ha visto agravada por los continuos ataques y la falta de recursos básicos, lo que ha llevado a situaciones de extrema vulnerabilidad para la población. El invierno representa un desafío adicional, con temperaturas extremadamente bajas que ponen en riesgo la salud y la seguridad de los ciudadanos. La preocupación del papa Francisco por la grave crisis humanitaria en Ucrania resalta la importancia de actuar rápidamente para brindar ayuda y protección a quienes están en situación de vulnerabilidad.
El papa Francisco exhorta a la comunidad internacional a unirse en solidaridad con el pueblo ucraniano y a tomar medidas concretas para apoyar su bienestar y su seguridad. Su llamado a no permitir que los ucranianos mueran de frío es un recordatorio de la responsabilidad compartida de proteger a los más vulnerables y garantizar que reciban la asistencia necesaria para sobrevivir a las adversidades. La crisis en Ucrania requiere una respuesta urgente y coordinada por parte de la comunidad mundial para evitar una catástrofe humanitaria y promover la paz en la región.