El éxito de la serie Emily en París ha llegado a niveles internacionales, incluyendo a políticos como Emmanuel Macron. La reciente noticia de una quinta temporada en la que la protagonista, Emily Cooper, se mudará a Roma, Italia, no fue del agrado del presidente francés, quien expresó su deseo de que la historia se mantuviera en París debido a la positiva atracción que genera en el país. Macron incluso mencionó que la participación de su esposa, Brigitte Macron, en la serie fue un buen momento para la imagen de Francia.
Sin embargo, estas declaraciones generaron críticas por parte del alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, quien consideró que Macron debería centrarse en temas más importantes que la ubicación de una serie de televisión. Gualtieri aseguró que Netflix no acepta órdenes de jefes de Estado y que la decisión de trasladar la trama a Roma es una confirmación de la importancia de la ciudad. De esta forma, el alcalde instó a Macron a relajarse y dejar que la producción de la serie tome sus propias decisiones.
El final de la cuarta temporada de Emily en París mostró a la protagonista involucrada en un nuevo romance en Italia, luego de su ruptura con Gabriel. Tras lograr convencer a la familia de su nuevo novio para trabajar con su agencia de marketing, Emily se ve obligada a quedarse en Roma para gestionar el proyecto. Esta decisión deja en suspenso si Roma se convertirá en el nuevo hogar de Emily, quien cambia su nombre de Instagram de "Emily in Paris" a "Emily in…" indicando una posible mudanza permanente a la capital italiana junto a su nuevo novio.
La serie ha generado controversia entre seguidores que apoyan la idea de que Emily se quede en París, manteniendo la esencia de la trama original, mientras que otros están emocionados por la posibilidad de explorar nuevas locaciones y tramas en Roma. La discusión entre Francia e Italia sobre el destino de Emily refleja el impacto cultural y turístico que una producción como esta puede tener en las ciudades donde se desarrolla, mostrando la importancia de la industria del entretenimiento en la promoción de destinos turísticos y en la imagen de un país en el extranjero.
A pesar de las diferencias de opinión entre líderes políticos y fanáticos de la serie, la noticia de una quinta temporada en Roma ha generado expectativas y emoción entre los seguidores de Emily en París. La trama de la serie ha logrado cautivar a audiencias de todo el mundo, convirtiéndose en un fenómeno televisivo que ha trascendido fronteras y generado debate incluso entre figuras políticas. La decisión de trasladar la historia a Roma representa un giro inesperado que promete nuevas aventuras para Emily y sus seguidores, quienes esperan ansiosos por descubrir qué depara el futuro para la carismática protagonista.
