Estados Unidos solicitó el despliegue urgente en Haití de una fuerza internacional liderada por Kenia, luego del asesinato de tres misioneros en un ataque de pandillas criminales. Entre las víctimas se encontraba una pareja de estadounidenses, la hija y el yerno del legislador del estado de Misuri, Ben Baker. Este ataque ocurrió en un orfanato en Plaine, al norte de Puerto Príncipe, controlado por bandas armadas desde hace varios meses. La situación de violencia en Haití ha empeorado en los últimos meses, con matanzas, ataques, violaciones y secuestros perpetrados por estas bandas armadas poderosas.
El Departamento de Estado de EE.UU. emitió un aviso de viaje instando a los ciudadanos estadounidenses a no viajar a Haití debido a las condiciones de seguridad impredecibles y peligrosas en el país. Los misioneros fallecidos, Natalie y Davy, se casaron en agosto de 2022 y se mudaron a Haití tres meses después para trabajar con la organización sin fines de lucro Missions in Haiti Inc., fundada por los padres de Davy en el año 2000. En redes sociales, se puede ver cómo se dedicaban principalmente a trabajar con niños haitianos y contribuir al desarrollo de la comunidad.
El Gobierno interino de Haití ha extendido por siete días más el toque de queda en el departamento del Oeste, donde se encuentra la capital, y ha declarado estado de emergencia para intentar frenar la violencia en el país. Este estado de emergencia se extendió por un mes con el objetivo de restablecer el orden y tomar medidas para recuperar el control ante los altos niveles de inseguridad causados por las bandas armadas que controlan gran parte de Puerto Príncipe y otras zonas. La situación en Haití se ha vuelto cada vez más difícil, con un aumento de la violencia que ha provocado miles de muertes el año pasado.
La noticia del asesinato de los misioneros estadounidenses en Haití fue compartida en redes sociales por el expresidente Donald Trump, quien expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias. La situación en Haití ha generado preocupación a nivel internacional, y se espera que la fuerza internacional liderada por Kenia llegue pronto al país para intentar frenar la violencia y contribuir a la estabilización de la situación. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha expresado su apoyo a este despliegue urgente y ha destacado la importancia de abordar la crisis de seguridad en Haití lo antes posible para evitar más tragedias como la ocurrida con los misioneros estadounidenses.