Este martes, se espera que el huracán Beryl, catalogado como "potencialmente catastrófico", se ubique al sur de Santo Domingo, a unos 325 kilómetros de distancia, según información de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet). Ante esta situación, el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) ha emitido una serie de recomendaciones a la población, como mantenerse informado a través de organismos oficiales, proteger puertas y ventanas, tener un botiquín de primeros auxilios y almacenar alimentos enlatados, entre otros consejos.
En cuanto a los detalles del huracán Beryl, a las 7:00 a.m. de este martes se encontraba a 410 km al sur/sureste de la Isla Saona y a 495 km al sureste de Punta Palenque, moviéndose hacia el oeste/noroeste a 35 kph. Con vientos máximos sostenidos de 270 kph, se espera que Beryl continúe su trayectoria alejándose de la costa, pero con vientos intensos que podrían afectar la región.
El COE ha declarado alerta roja para las provincias de Barahona y Pedernales, alerta amarilla para 10 provincias, incluido el Distrito Nacional, y alerta verde para otras 10 provincias. Se recomienda a todas las embarcaciones permanecer en puerto debido a las condiciones peligrosas del mar provocadas por el huracán Beryl, y se insta a la población a mantenerse alejada de la costa para evitar posibles daños por oleaje anormal.
Este huracán de categoría 5 ha generado preocupación en la región debido a su intensidad y posibles impactos, por lo que se han activado medidas de emergencia para proteger a la población y minimizar los riesgos. Se espera que Beryl se aleje de la costa en las próximas horas, pero se recomienda a la población permanecer atenta a las actualizaciones de las autoridades y seguir las recomendaciones de seguridad.
En resumen, el huracán Beryl se acerca a la República Dominicana con vientos intensos y potencialmente catastróficos, por lo que se han activado alertas en varias provincias y se han emitido recomendaciones para protegerse. Es importante seguir las indicaciones de las autoridades, mantenerse informado y prepararse para posibles impactos. La población debe estar alerta y tomar las medidas necesarias para proteger su vida y su propiedad ante la llegada de este fenómeno meteorológico peligroso.