Los primeros franciscanos que llegaron al Caribe durante los primeros años de la colonización han sido acusados de mostrar indiferencia hacia los indígenas y de colaborar con los opresores, sin embargo, el franciscano Mariano Errasti en su libro “Los primeros franciscanos en América. Isla Española, 1492-1520” desmiente estas afirmaciones, destacando que los franciscanos denunciaron los abusos cometidos contra los indígenas antes que fray Antón de Montesinos.
Fray Mariano Errasti, un misionero nacido en el País Vasco y residente en República Dominicana, dedicó parte de su vida a investigar en el Archivo General de Indias para desmentir las acusaciones contra los franciscanos. El franciscano Jit Manuel Castillo de la Cruz respalda las investigaciones de Errasti y destaca la labor equilibrada y serena con la que trató el tema. Ambos coinciden en que la distorsión de la actuación de los franciscanos se debe a los énfasis que puso el padre Las Casas en su “Historia de las Indias” para resaltar la labor de los dominicos.
Las investigaciones históricas recientes han permitido apreciar de manera más objetiva la actuación de los franciscanos en el Nuevo Mundo y han revelado las contradicciones presentes en los textos de Las Casas. Documentos del Archivo Ibero-Americano y estudios de varios investigadores han arrojado luz sobre la labor evangelizadora de los franciscanos en las Antillas, destacando el trabajo de frailes como Bernardo Boil, Ramón Pané, Juan de la Deule, Juan de Cosin, Juan de Trasierra y Juan de Robles, quienes aprendieron las lenguas indígenas y estudiaron su cultura.
Se ha documentado que los franciscanos, junto con los dominicos, denunciaron el maltrato hacia los indígenas desde sus primeros años en el Nuevo Mundo. Fray Tomás Infante, fray Francisco de San Román, fray Pedro Mejía de Trillo y fray Remigio de Faulx fueron algunos de los franciscanos destacados en la defensa de los indígenas. Incluso Bartolomé de Las Casas hace referencia a la labor de estos frailes en la protección de los indígenas, mucho antes del Sermón de Montesinos.
Fray Jit resalta la importancia de corregir la imagen distorsionada que se ha proyectado sobre la actuación de los franciscanos en los inicios de la época colonial, y menciona la labor del franciscano puertorriqueño Antonio Bonilla, mentor de Juan Pablo Duarte. Los estudios realizados por Errasti y otros investigadores han permitido una revisión objetiva y positiva de la labor de los primeros franciscanos en América, desmintiendo las acusaciones de complicidad con los opresores y mostrando su compromiso con la protección de los indígenas.
En resumen, los primeros franciscanos que llegaron al Caribe durante la colonización fueron denunciados por su supuesta indiferencia hacia los indígenas y colaboración con los opresores, sin embargo, investigaciones históricas recientes han desmentido estas acusaciones. La labor de los franciscanos en la protección de los indígenas y su defensa ante los abusos cometidos en el Nuevo Mundo ha sido resaltada por estudios en archivos históricos y por la revisión de las fuentes originales. Es importante enmendar la imagen distorsionada que se ha proyectado sobre la actuación de los franciscanos en los inicios de la época colonial y reconocer su compromiso con la justicia y la defensa de los más vulnerables.