En septiembre de 2024, la República Dominicana registró una inflación mensual del 0.30 %, lo que representó una desaceleración en comparación con las tasas observadas en los meses anteriores. El índice de precios al consumidor (IPC) mostró una variación interanual de 3.29 %, situándose por debajo de las cifras de julio y agosto. Esta cifra se encuentra dentro del rango meta establecido por el Banco Central, que es de 4.0 % ± 1.0 %, por décimo mes consecutivo desde diciembre de 2023.
La inflación mensual en septiembre de 2024 fue influenciada principalmente por la desaceleración en el crecimiento de los precios de los alimentos. Por otro lado, la inflación subyacente, que excluye ciertos productos como alimentos con precios volátiles, combustibles y servicios con precios regulados, se mantuvo en 4.01 % en los últimos doce meses, ubicándose en torno al objetivo establecido por el Banco Central. Este indicador es importante para la conducción de la política monetaria ya que brinda señales más claras sobre las condiciones de liquidez en la economía.
La República Dominicana se encuentra entre los países de menor inflación en América Latina, excluyendo a las economías dolarizadas como Panamá, Ecuador y El Salvador, con una tasa de inflación interanual de 3.29 % en septiembre de 2024. El grupo de Educación fue el segundo en contribuir a la inflación del mes, con una variación del 2.13 % debido al proceso de matriculación del nuevo año escolar. Por otro lado, el grupo de Bebidas Alcohólicas y Tabaco mostró una variación del 1.93 %, impulsada por el aumento en los precios de la cerveza envasada.
En conclusión, la economía de la República Dominicana ha mantenido una inflación estable en septiembre de 2024, con un índice de precios al consumidor que se encuentra dentro del rango meta establecido por el Banco Central. La desaceleración en la inflación mensual se debe principalmente a factores como la disminución en el ritmo de crecimiento de los precios de los alimentos. La inflación subyacente, que excluye ciertos productos volátiles, se mantiene en torno al objetivo, lo que permite una mejor conducción de la política monetaria. La República Dominicana se posiciona como uno de los países con menor inflación en América Latina, excluyendo a las economías dolarizadas.