El canciller dominicano, Roberto Álvarez, reveló que de los casi 2 millones de alumnos que cursan la educación básica y secundaria en escuelas públicas en la República Dominicana, 200 mil son extranjeros, y de estos, 143 mil son de origen haitiano, lo que representa el 71.5% del total. Álvarez destacó que el costo anual por cada uno de estos alumnos es de aproximadamente US$2,900, lo que significa un gasto total de entre 400 y 500 millones de dólares para el país.
El canciller enfatizó que la República Dominicana no rechaza brindar asistencia humanitaria o servicios a la población haitiana, pero hay límites en estos aspectos y es necesario llevar a cabo deportaciones, ya que la ley establece que cualquier persona que se encuentre en un estatus migratorio irregular no tiene derecho a permanecer en el país. Además, se refirió a la cantidad de mujeres haitianas que se benefician del sistema de salud dominicano, señalando la responsabilidad de la comunidad internacional en la crisis que enfrenta Haití.
Álvarez recordó la historia de ocupaciones e invasiones por parte de Haití a la República Dominicana, señalando que el país nunca ha sido responsable de lo que ocurre en su vecino del oeste de la isla. Destacó que la independencia dominicana fue respecto a Haití y que después de su independencia en 1844, sufrió cuatro invasiones de ejércitos haitianos en tan solo 12 años. Subrayó que ningún soldado dominicano ha invadido territorio haitiano y que la relación entre ambos países ha sido compleja a lo largo de la historia.
El canciller reiteró el apoyo de la República Dominicana a la población haitiana y calificó como manipulación internacional la acusación de racismo hacia su país. Señaló que la situación migratoria y la cooperación humanitaria entre ambos países debe ser abordada de forma objetiva y transparente, respetando la legalidad y los derechos de todas las personas involucradas. En medio de las tensiones y desafíos en la frontera entre República Dominicana y Haití, el gobierno dominicano busca manejar la situación de manera responsable y respetuosa.