El mundo digital ha causado un aumento en la infidelidad en las parejas, generando nuevas modalidades y complicando la definición de lo que significa ser infiel. Según un estudio realizado en México en 2020, la infidelidad se clasifica en tres categorías: física, digital y emocional. Los actos digitales que más causan dolor en los mexicanos son enviar fotos sugerentes, usar aplicaciones para buscar pareja, coquetear en línea, entre otros.
La infidelidad no puede ser definida de manera generalizada, ya que cada pareja establece sus propias reglas de exclusividad. Según la psicóloga clínica Miren Larrazabal, el mundo digital ha multiplicado las formas de infidelidad y ha abierto nuevas posibilidades para relaciones a distancia. La definición de infidelidad varía según cada vínculo, y lo que puede considerarse una traición en una relación, puede no serlo en otra.
El principal efecto secundario de la infidelidad sigue siendo la causa principal de ruptura en las parejas. Las infidelidades en el mundo analógico solían diferenciarse entre sexuales y emocionales, pero en la actualidad, el contacto físico ha dejado de ser imprescindible. Incluso el simple hecho de ver pornografía, utilizar aplicaciones de citas sin llegar a usarlas o interactuar en redes sociales con ex parejas puede ser considerado como infidelidad.
El intercambio de likes, comentarios y conversaciones íntimas en línea puede ser motivado por diversos factores, como la necesidad de reforzar la autoestima, buscar nuevas experiencias o desear una emoción furtiva. El perfil del infiel digital suele ser alguien con baja autoestima que busca refuerzos instantáneos. La película "Sexo, mentiras y cintas de video" también exploró el tema de la infidelidad, que se ha vuelto más común en el mundo actual.
Las estadísticas muestran que el sexo es menos frecuente en la actualidad en comparación con generaciones anteriores. El mundo digital ha transformado la forma en que las parejas interactúan y se relacionan, aumentando la posibilidad de infidelidades. A pesar de los cambios en la sociedad, la infidelidad sigue siendo un tema delicado que puede causar un profundo dolor en las parejas afectadas. La tecnología ha proporcionado nuevas formas de engaño, lo que hace que sea importante establecer límites claros en una relación para evitar conflictos.