El Ministerio Público ha nombrado como Operación Camaleón al caso de corrupción en el Instituto Nacional de Transporte y Tránsito Terrestre (Intrant), donde el exdirector Hugo Beras está implicado junto con otros siete imputados. Los detenidos incluyen a José “Jochi” Gómez-Canaán, Samuel Gregorio Baquero Sepúlveda, Frank Rafael Díaz, Pedro Vinicio Padovani, Juan Francisco Álvarez y Carlos José Peguero Vargas. La operación incluyó allanamientos en residencias y empresas en varias ubicaciones, con la participación de 170 efectivos de la Policía Nacional y más de 30 fiscales especializados en crimen organizado. Se ocuparon cientos de evidencias durante los allanamientos, que se extendieron por doce horas.
Uno de los aspectos de la imputación incluye un contrato fraudulento para la modernización del sistema de semaforización en el Gran Santo Domingo, así como un contrato ilegal con el Ministerio de Defensa y la empresa Aurix. Se ha señalado que estos contratos fueron utilizados para usurpar funciones de organismos de inteligencia, seguridad y defensa del Estado, así como para sabotear la red semafórica en el mes de agosto. Los detenidos permanecen en el Centro de Atención de Privación de Libertad de la Fiscalía del Distrito Nacional, en espera del avance de las investigaciones y el proceso judicial correspondiente.
La Operación Camaleón fue desplegada en la noche del 2 de octubre de 2024, y se llevaron a cabo allanamientos en el Distrito Nacional, Santo Domingo Este, San Cristóbal y Punta Cana. La participación de un gran número de efectivos policiales y fiscales especializados en crimen organizado resalta la importancia y magnitud de este caso de presunta corrupción y crimen organizado en el ámbito del transporte y tránsito terrestre. Durante los allanamientos, se realizaron incautaciones de diversas evidencias que serán clave para el desarrollo de la investigación y el esclarecimiento de los hechos.
La implicación de altos funcionarios del Instituto Nacional de Transporte y Tránsito Terrestre en presuntos actos de corrupción y crimen organizado es un tema de preocupación para la sociedad dominicana. La corrupción en entidades gubernamentales afecta la confianza de la ciudadanía en las instituciones, así como la transparencia en el manejo de recursos públicos. La Operación Camaleón representa un paso importante en la lucha contra la corrupción y la impunidad en República Dominicana, demostrando la determinación de las autoridades de investigar y sancionar este tipo de delitos.
La ocupación de evidencias durante los allanamientos realizados en el marco de la Operación Camaleón es un indicio de la seriedad y el alcance de las investigaciones en este caso. La presunta red de corrupción y crimen organizado que se está investigando involucra a varios imputados, incluyendo al exdirector del Intrant, lo que subraya la gravedad de los delitos que se están investigando. Es fundamental que se lleve a cabo un proceso judicial transparente y equitativo, donde se respeten los derechos de los acusados y se garantice la justicia para las posibles víctimas de estos actos ilícitos.
La colaboración entre diferentes instituciones como el Ministerio Público, la Policía Nacional y fiscales especializados en crimen organizado es esencial para el éxito de operaciones como la Operación Camaleón. La coordinación entre estas entidades permite una investigación más eficaz y exhaustiva, así como la recolección de pruebas sólidas que puedan ser presentadas en el proceso judicial. La sociedad dominicana espera que este caso se resuelva de manera transparente y se sancione a los responsables de manera ejemplar, como una señal de que la corrupción y el crimen organizado no serán tolerados en el país.