La presidenta de la organización de derechos humanos Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA), Carolina Jiménez Sandoval, expresó su preocupación respecto al "modelo Bukele" implementado por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, como estrategia de seguridad contra las pandillas. Según Jiménez Sandoval, este modelo no es la solución a los problemas de criminalidad en América Latina, ya que se basa en detenciones masivas que han elevado la tasa de encarcelamiento en El Salvador, la más alta del planeta. Aunque ha contribuido a disminuir los homicidios en el país, es señalado por ONG nacionales e internacionales de violar derechos humanos.
La medida de excepción, que se ha extendido por vigésimo quinta vez por el Congreso de El Salvador, ha dejado al menos 79,211 detenciones de personas acusadas de ser pandilleros o colaboradores de las maras. En este contexto, se han recibido más de 6,000 denuncias de violaciones a los derechos humanos, principalmente por detenciones arbitrarias y torturas. Además, las muertes de detenidos bajo custodia estatal superan las 200, y organizaciones como Amnistía Internacional advierten que la violencia de las pandillas se ha visto sustituida por la estatal en las comunidades empobrecidas. Jiménez Sandoval afirmó que América Latina necesita modelos de justicia eficientes y fortalecidos que sirvan a la ciudadanía para reducir la criminalidad, y que el modelo Bukele lesionar derechos humanos y logra grandes retrocesos en este aspecto.
La experta en derechos humanos señaló que el modelo Bukele es una práctica preocupante que ha elevado el nivel de encarcelamiento en El Salvador, pero que no es la solución a la criminalidad en América Latina. Destacó que cada país enfrenta situaciones diferentes en cuanto a este tema, por lo que es indispensable respetar las prácticas democráticas en cualquier estrategia de seguridad. Jiménez Sandoval insistió en que no existe una solución fácil para las crisis de inseguridad en la región y que se debe trabajar en fortalecer los modelos de justicia que sirvan a la ciudadanía en lugar de violar derechos humanos en detrimento de la democracia.
En el video difundido por WOLA, Jiménez Sandoval expresó su inquietud ante la posible replicación de modelos de seguridad como el implementado por Bukele en El Salvador por parte de otros gobiernos de América Latina. Aunque esta estrategia ha logrado disminuir los homicidios en el país centroamericano y ha incrementado la popularidad del presidente, ha sido criticada por su violación de derechos humanos debido a las detenciones masivas y arbitrariedades que se han dado en el marco del régimen de excepción. La presidenta de WOLA concluyó que el modelo Bukele tiene un costo en términos de prácticas democráticas que no deben sacrificarse en aras de lograr resultados en materia de seguridad.
La presidenta de WOLA reiteró que América Latina necesita modelos de justicia eficientes y fortalecidos que respeten los derechos humanos y contribuyan a reducir la criminalidad en la región. Aseguró que el modelo Bukele no es la solución a las crisis de inseguridad que enfrenta la región y que solo logra retrocesos en materia de derechos humanos. La experta en derechos humanos enfatizó la importancia de respetar las prácticas democráticas en cualquier estrategia de seguridad y trabajar en fortalecer los sistemas de justicia para beneficio de la ciudadanía. En este sentido, instó a los gobiernos de la región a buscar soluciones que respeten los derechos humanos y contribuyan a mejorar la seguridad de sus ciudadanos sin vulnerar principios fundamentales de la democracia.