En Puerto Príncipe, al menos once presos murieron durante una fuga de la cárcel civil de Saint-Marc, que fue atacada por bandas armadas. La Policía Nacional de Haití informó que los reclusos murieron en enfrentamientos con algunos uniformados. Según el portavoz policial Michel-Ange Louis-Jeune, los delincuentes atacaron la prisión durante la madrugada y varios presos lograron escapar. Uno de los fugados fue detenido en la localidad de Arcahaie gracias a la colaboración de la población.
En Haití, las fugas de prisiones civiles se han convertido en algo habitual en la última década. Durante el año 2024, se han reportado tres fugas importantes en Puerto Príncipe, Croix-des-Bouquets y Saint-Marc, con cientos de reclusos escapando y empeorando la precaria situación de seguridad en el país. En junio, comenzó el despliegue de efectivos de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) para Haití, liderada por Kenia y respaldada por la ONU.
Según un informe de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH), al menos 1,379 personas fueron víctimas de la violencia de las bandas armadas en Haití durante el segundo trimestre de 2024, entre muertos y heridos, elevando a casi 3,900 las víctimas en el primer semestre del año. Esta situación demuestra la grave crisis de seguridad que atraviesa el país caribeño, con constantes enfrentamientos armados y ataques a centros penitenciarios.
Las autoridades haitianas siguen enfrentando grandes desafíos para contener la violencia y lograr la estabilidad en el país. Las bandas armadas han ganado poder y han provocado un aumento en los índices de violencia, con fugas masivas de cárceles que complican aún más la situación. La colaboración de la población es fundamental para poder capturar a los fugitivos y restablecer el orden en las comunidades afectadas por la delincuencia.
La presencia de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) es un paso importante para fortalecer las capacidades de las fuerzas del orden en Haití y mejorar la seguridad en el país. Sin embargo, se requiere de un esfuerzo conjunto de la comunidad internacional y las autoridades locales para combatir eficazmente la violencia y el crimen organizado en la nación caribeña. La coordinación entre los diferentes actores es esencial para lograr avances significativos en materia de seguridad y justicia en Haití.
Es fundamental que se tomen medidas urgentes para abordar la crisis de seguridad en Haití y proteger a la población de la violencia de las bandas armadas. La comunidad internacional debe reforzar su apoyo al país caribeño y trabajar en conjunto con las autoridades locales para establecer estrategias efectivas que permitan combatir la delincuencia y garantizar la paz y estabilidad en Haití. La situación actual requiere de un compromiso firme y acciones concretas para proteger los derechos y la seguridad de todos los haitianos.