El Proyecto de Ley de Modernización Fiscal presentado por el gobierno de Luis Abinader ha generado malestar en diversos sectores, siendo cuestionado por la exvicepresidenta Margarita Cedeño y el candidato presidencial del PLD, Francisco Domínguez Brito. Cedeño expresó su preocupación por los posibles efectos negativos de la reforma en la vida de los ciudadanos dominicanos, recordando cómo en 2021 la sociedad presionó para retirar una propuesta similar debido a las difíciles condiciones económicas del país. Ante esta nueva propuesta, Cedeño planteó la necesidad de evaluar si la reforma permitirá financiar obras y servicios, mejorar la calidad de vida de los dominicanos y fortalecer a la clase media.
Francisco Domínguez Brito también se pronunció en contra de la propuesta de nuevos impuestos, señalando la importancia de que el gobierno ordene su administración y evite el caos en el gasto público. Criticó el crecimiento desmesurado de la nómina pública, los incrementos salariales desproporcionados y la existencia de plazas innecesarias, llamadas "botellas". Además, denunció pensiones millonarias otorgadas a dirigentes del PRM y allegados, así como gastos excesivos en publicidad y en el sector eléctrico. Brito hizo un llamado al gobierno a retirar la propuesta de nuevos impuestos y a entablar un diálogo con los sectores del país para tomar decisiones consensuadas.
Cedeño comparó al Estado con una empresa, cuestionando la gestión de recursos y sugiriendo que se debe definir claramente el destino de los ingresos adicionales para la nación. Planteó la necesidad de reflexionar sobre hacia dónde debe dirigirse el modelo de desarrollo de la República Dominicana antes de imponer nuevas cargas fiscales que afecten la economía de la ciudadanía. Ambos líderes políticos destacaron la importancia de la transparencia en la administración de los recursos públicos y de priorizar el bienestar de la población en las decisiones de política fiscal.
En cuanto a la propuesta de recaudar aproximadamente 121 mil millones de pesos con nuevos impuestos, Brito consideró irónico que se pretenda obtener más ingresos cuando se han destinado grandes sumas en gastos innecesarios. Criticó la falta de eficiencia en la gestión del sector eléctrico, las pérdidas millonarias que esto ha ocasionado y los excesivos gastos en publicidad durante las elecciones. Hizo un llamado al gobierno a organizar su administración antes de imponer nuevos impuestos y a buscar consensos con los diferentes sectores del país para tomar decisiones adecuadas en materia fiscal.
Ambos líderes políticos coincidieron en la importancia de evaluar detenidamente el impacto de la reforma fiscal propuesta por el gobierno de Abinader en la economía y la calidad de vida de los dominicanos. Cedeño planteó la necesidad de cuestionar el destino de los ingresos adicionales y de fortalecer la clase media, mientras que Brito hizo énfasis en la urgencia de ordenar la administración pública antes de implementar nuevos impuestos. Ambos llamaron al diálogo y al consenso como vías para tomar decisiones que beneficien al país en su conjunto.
