El ministro de Educación, Ángel Hernández, compartió la respuesta que recibió del presidente Luis Abinader cuando puso su cargo a disposición después de la reelección del mandatario. Durante un almuerzo con el Grupo de Comunicaciones Corripio, Hernández relató cómo fue la conversación que mantuvo con el presidente dos días después de su victoria en las elecciones.
Hernández le expresó al presidente Abinader que estaba dispuesto a dejar su cargo para que él pudiera designar a la persona que considerara conveniente para los próximos años. Sin embargo, la respuesta del presidente fue clara y directa, indicándole que en las áreas de Salud Pública y Educación no se realizarían cambios, ya que acababa de designar a alguien en Salud Pública y confiaba plenamente en Hernández para el Ministerio de Educación.
El ministro Hernández también explicó que, aunque ya sabía desde hace tres meses que no sería removido de su cargo, entiende que dentro de su partido es normal que existan aspiraciones y que algunas personas busquen alianzas estratégicas para disponer de ciertos ministerios. A pesar de ello, lanzó un reto a quienes lo critican, retándolos a demostrar que en su ministerio se haya realizado algo indebido, destacando su gestión y transparencia en el cargo.
Este proceso revela la confianza que el presidente Abinader tiene en el ministro Hernández y su trabajo en el Ministerio de Educación. La decisión de mantenerlo en el cargo muestra la valoración de su labor y la importancia que se le otorga a la continuidad en las políticas educativas implementadas durante su gestión. Esto también señala la estabilidad y coherencia en el equipo de gobierno.
El ministro de Educación desafía a sus críticos a demostrar cualquier irregularidad en su gestión, mostrando seguridad en su trabajo y transparencia en sus acciones. La confianza del presidente Abinader en Hernández y la decisión de mantenerlo en el cargo refuerzan la estabilidad en el Ministerio de Educación y en las políticas educativas del país. Esto resalta la importancia de la continuidad y el compromiso con la educación en la República Dominicana.
En resumen, la conversación entre el ministro de Educación y el presidente Abinader refleja la confianza mutua y la valoración del trabajo realizado en el Ministerio de Educación. La decisión de mantener a Hernández en su cargo muestra la estabilidad y continuidad en las políticas educativas del país, así como el compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas. El desafío lanzado por el ministro evidencia su seguridad en su gestión y su disposición a demostrar la calidad y legalidad de su trabajo frente a las críticas recibidas.
