Durante la vigésimo tercera cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) celebrada en Caracas, los líderes de la organización destacaron la importancia de que la comunidad internacional coopere en la recuperación integral de Haití, que se encuentra inmerso en una grave crisis de violencia. El presidente venezolano, Nicolás Maduro, enfatizó la necesidad de construir un modelo de apoyo y acompañamiento para Haití desde la ALBA, para ayudar en el rescate de su democracia y en la construcción de la paz en el país.
El líder chavista expresó que la democracia, la libertad, la paz y la recuperación social en Haití no se lograrán a través de intervenciones militares o policiales. La ALBA, creada en 2004 y conformada por 10 países, cuenta con Haití como uno de sus invitados especiales, junto con Siria y Surinam. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, señaló que la comunidad internacional tiene una deuda pendiente con el pueblo haitiano, que necesita asistencia y cooperación para superar sus desafíos.
Díaz-Canel subrayó que el pueblo haitiano tiene derecho a encontrar una solución pacífica, sostenible y duradera a sus problemas, respetando su libre determinación, soberanía e independencia. Propuso la creación de un fondo internacional de solidaridad para la recuperación de Haití, financiado por la comunidad internacional y destinado a atender las necesidades prioritarias del país. En ese sentido, instó a la comunidad internacional a aportar recursos para apoyar la recuperación de Haití.
En medio de la crisis que enfrenta Haití, los líderes de la ALBA reiteraron su compromiso de solidaridad con el pueblo haitiano y su disposición a colaborar en su recuperación integral. Destacaron la importancia de construir un enfoque basado en el diálogo, el respeto a la soberanía y la cooperación mutua para superar los desafíos que enfrenta la nación caribeña. Aseguraron que la intervención militar o policial no es la respuesta para resolver la crisis en Haití.
La comunidad internacional ha sido instada a asumir su responsabilidad con el pueblo haitiano y a brindar el apoyo necesario para su recuperación. A través de la creación de un fondo internacional de solidaridad, se busca canalizar recursos para atender las necesidades prioritarias de Haití y colaborar en su proceso de reconstrucción. Los líderes de la ALBA han hecho un llamado a la comunidad internacional para que se sume a este esfuerzo y contribuya a la reconstrucción de Haití.