El presidente Luis Abinader resaltó el crecimiento económico de la República Dominicana en los últimos cincuenta años, destacando un crecimiento anual del 5% y un PIB de más de 130 mil millones de dólares, convirtiéndola en la séptima economía más grande de América Latina y el Caribe. La estabilidad macroeconómica del país ha atraído a inversores y ha generado un importante flujo de inversión extranjera directa, representando cerca del 4% del PIB en los últimos años.
Durante su participación en la Conferencia sobre Inversión en Infraestructura en América Latina y el Caribe del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) y Financial Times, el presidente Abinader destacó la importancia de identificar oportunidades para inversores y gestionar activos. La mejora en la calificación de Fitch, Standard and Poor’s y Moody’s ha hecho que el riesgo país dominicano sea menor que el de otras naciones con calificación de grado de inversión, lo que facilita el acceso a los mercados financieros internacionales.
El presidente mencionó que República Dominicana está invirtiendo en el sector energético, con el objetivo de alcanzar una reserva fría para el año 2027 y lograr el 30% de generación renovable para 2030, además de tender un cable submarino para vender electricidad a Puerto Rico. Asimismo, destacó los esfuerzos del país para convertirse en un hub logístico de clase mundial, con una infraestructura portuaria y aeroportuaria en constante desarrollo.
Abinader resaltó la fortaleza de República Dominicana para atraer inversión extranjera en el sector turístico, mencionando proyectos en Punta Cana, Miches y Pedernales, así como la revitalización de la zona turística de Puerto Plata con el proyecto turístico e inmobiliario Playa Bergantín. El presidente también se refirió al compromiso del país en expandir las operaciones mineras de oro, plata, níquel y bauxita, en línea con estándares internacionales de transparencia en la industria.
El presidente Abinader expresó su compromiso con nuevas inversiones en infraestructura como un elemento esencial para el desarrollo sostenible y el crecimiento económico. Destacó la importancia del crecimiento inclusivo y sostenible, la estabilidad política y la libertad individual, señalando que el desarrollo dentro de una democracia es fundamental para que sus frutos lleguen a todos los ciudadanos. Finalmente, invitó a visitar la República Dominicana y trabajar juntos para lograr un legado valioso para las generaciones futuras.