En un juicio escalofriante, Robert y Anne Geeves, ambos de 64 años, han sido acusados de asesinar a su inquilina Amber Haigh, una joven de 19 años, con discapacidad intelectual, para robarle a su bebé y luego alimentar con su cuerpo a los cerdos, conmocionando a Australia. Los Geeves se declararon inocentes del crimen y la joven fue vista por última vez en junio de 2002, desapareciendo en los vastos campos de Nueva Gales del Sur. Los fiscales sostienen que los Geeves querían tener otro hijo y utilizaron a Amber como madre sustituta, planeando asumir la custodia del bebé.
Amber Haigh mantenía una relación sentimental con el hijo de los Geeves, Robbie, y continuaba en contacto con la pareja debido al alquiler de una vivienda. Tras su desaparición en 2002, la investigación forense determinó que había muerto como resultado de un homicidio o accidente. Sin embargo, el caso permaneció sin resolver hasta que el Escuadrón de Homicidios reabrió la investigación en 2022, lo que llevó al arresto de los Geeves. Durante el juicio, los fiscales argumentaron que la pareja planeaba obtener la custodia del bebé y que la joven había expresado temor por su vida.
El caso de los Geeves se basa en la teoría de que querían tener otro hijo y utilizaron a Amber como madre sustituta, eliminándola para quedarse con el bebé. Sin embargo, la defensa cuestiona esta teoría y alega que no hay evidencias físicas de que la joven temiera por su vida. Los investigadores encontraron un cheque utilizado para comprar una motosierra en la época de la desaparición de Amber, lo que alimentó las sospechas. Además, se mencionó un acuerdo escrito entre la joven y Robert Geeves en el que él se comprometía a no intentar obtener la custodia del bebé sin su consentimiento.
En un giro dramático, el hijo mayor de los Geeves, Robbie, testificó en el juicio y reveló una profunda fractura en la relación familiar. Expresó que su vínculo con sus padres se vio dañado irreparablemente después de que su padre dejara embarazada a su exnovia, Amber. La impactante relación entre su padre y la víctima generó controversia y añadió un nuevo nivel de tragedia al caso. A pesar de las acusaciones y testimonios, la defensa de los Geeves insiste en que el caso de la fiscalía está plagado de fallos y que todo lo que se hace en su contra se ve a través de una nube de desconfianza y sospecha.
El juicio de los Geeves continúa ante la jueza Julia Lonergan, en medio de un aura de misterio y horror que ha conmocionado a Australia. Los detalles escalofriantes del caso, la desaparición de Amber Haigh y la supuesta trama de los Geeves para robarle a su bebé siguen siendo motivo de debate y controversia. A medida que se revelan más detalles y testimonios, se espera que la verdad detrás de este crimen macabro salga a la luz y se haga justicia por la joven víctima.