El gobierno dominicano planea implementar una serie de medidas para contener el gasto público como parte de la segunda ola de reformas de reestructuración. Entre ellas se encuentra la eficientización del uso de la publicidad estatal, concentrándola únicamente en las instituciones que realmente la necesitan, dándole un contenido educativo e informativo. Asimismo, se prohíbe la compra de vehículos no utilitarios o de lujo, los gastos destinados a eventos generales y celebraciones de aniversarios de las instituciones, y la impresión de memorias institucionales.
Además, se ha dispuesto congelar la cantidad de empleados públicos en cada institución a los niveles de agosto de 2024, con excepciones para la contratación de policías, militares, personal médico y docente. El Ministerio de Administración Pública (MAP) podrá aprobar dispensas de forma extraordinaria en base a la necesidad, con un plazo máximo de 4 meses para implementarlas. Del mismo modo, todo viaje al exterior por parte de las instituciones deberá contar con la aprobación de su órgano rector o de adscripción.
El ministro de Hacienda, José Manuel (Jochi) Vicente, ha afirmado que el gobierno no permitirá el uso de recursos públicos para montar eventos, gastando dinero que podría destinarse a otras necesidades dentro de las instituciones. Se prevé una prohibición de gastos relacionados con eventos generales. Estas medidas buscan optimizar el uso de los recursos públicos y garantizar una gestión más eficiente en el sector gubernamental.
Las acciones propuestas forman parte de un plan más amplio de reformas y reestructuración del gobierno dominicano, en línea con los esfuerzos por lograr una mayor transparencia y eficacia en la administración pública. Se busca reducir el gasto superfluo y enfocar los recursos en áreas prioritarias para el desarrollo del país. La prohibición de gastos innecesarios y la racionalización de los recursos son pasos importantes hacia una gestión más eficiente y responsable del dinero público.
Estas medidas reflejan la voluntad del gobierno de implementar reformas que contribuyan a una mejor gestión de los recursos públicos y a una mayor eficiencia en el funcionamiento de las instituciones estatales. Se espera que estas acciones ayuden a mejorar la salud financiera del Estado y a asegurar una utilización más adecuada de los fondos públicos en beneficio de la sociedad dominicana. La fiscalización y el control del gasto público son pilares fundamentales en la gestión gubernamental, y estas reformas van en esa dirección.
En conclusión, las medidas propuestas por el gobierno dominicano para contener el gasto público son parte de un plan integral de reformas y reestructuración para garantizar una gestión más eficiente y transparente de los recursos estatales. La prohibición de gastos innecesarios, la optimización de los recursos y la focalización en áreas prioritarias son pasos importantes para mejorar la administración pública y promover un uso responsable del dinero público. Estas acciones reflejan el compromiso del gobierno con la transparencia, la eficacia y la buena práctica en la gestión de los asuntos públicos.