Las lesiones causadas por la turbulencia en un avión no se pueden prevenir por completo, incluso utilizando el cinturón de seguridad durante todo el vuelo. Además, las turbulencias no siempre se pueden predecir. Las causas de las turbulencias en un avión pueden ser diversos, incluyendo movimientos inusuales del aire, presión atmosférica, aire alrededor de las montañas, frentes climáticos fríos o calientes, y tormentas eléctricas. La Administración Federal de Aviación (FAA) señala que la turbulencia es la causa principal de lesiones de pasajeros en vuelos, con un promedio anual de 58 personas en EE.UU. que sufren lesiones en vuelos turbulentos sin llevar el cinturón de seguridad.
La mayoría de los accidentes por turbulencias ocurren cuando el avión se encuentra por encima de los 30.000 pies (9.144 metros). Los pasajeros en vuelos turbulentos pueden experimentar situaciones extremas, como mantas "volando" hasta el techo, sensación de montaña rusa, gritos y movimientos bruscos. Es importante tener en cuenta que ningún avión está libre de atravesar una turbulencia, ya que puede suceder en cualquier tipo de clima y en cualquier momento. Los pilotos y la tripulación a bordo son diligentes en encender la luz de "ajuste el cinturón de seguridad" cuando se detecta turbulencia, aunque a veces puede ocurrir repentinamente sin previo aviso.
Los pasajeros deben tener especial precaución durante turbulencias, ya que incluso con el cinturón de seguridad pueden ser impactados por movimientos bruscos. En casos de turbulencias severas, un pasajero puede ser noqueado, arrojado al techo o incluso golpeado por objetos sueltos en la cabina. Es importante destacar que los niños en vuelo son especialmente vulnerables, ya que pueden convertirse en "objetos voladores" durante turbulencias. Además, la turbulencia puede ocasionar que se abran compartimentos de equipaje, que el carrito de comidas se desplace sin control, y que se produzcan lesiones graves dentro del avión.
Un experimentado expiloto de American Airlines recuerda casos de turbulencia severa que provocaron lesiones graves en pasajeros, como platos de vidrio rotos, asistentes de vuelo golpeados y lesiones en el cuello, espalda y nariz. A pesar de las advertencias, algunas personas tienden a levantarse durante un vuelo para ir al baño, buscar agua o estirarse, incluso cuando la señal de cinturón de seguridad está activada. En estos casos, lo mejor para los pasajeros es atender a las indicaciones de la tripulación y permanecer en sus asientos durante turbulencias para garantizar su seguridad y la de los demás en el avión. La prevención y la precaución son fundamentales para evitar lesiones durante vuelos turbulentos.