El recluso Michael Deivi Ramírez, quien murió después de secuestrar al coronel Ricardo Bidó, comandante de la cárcel del 15 de Azua, estaba cumpliendo una condena de 20 años de prisión por matar a un cabo de la Policía Nacional en octubre de 2011. El Tribunal Colegiado del Distrito Judicial de Azua lo encontró culpable de este crimen y dictó la sentencia el 7 de noviembre de 2012. El Ministerio Público había solicitado una condena de 20 años de prisión para Ramírez por violación de los artículos 295 y 304 del código penal dominicano. El coronel secuestrado fue rescatado por agentes de la Policía Nacional y agentes penitenciarios, resultando herido durante el incidente.
El secuestro del coronel Ricardo Bidó por parte de Michael Deivi Ramírez tuvo lugar en la cárcel del 15 de Azua, donde el recluso cumplía su condena por el asesinato de un cabo de la Policía Nacional. El coronel fue rescatado por las autoridades después de varias horas de cautiverio. Este incidente puso de manifiesto la peligrosa situación en las cárceles dominicanas y la necesidad de mejorar la seguridad en estos centros penitenciarios para evitar situaciones como esta en el futuro. El hecho de que un recluso condenado por un crimen tan grave pudiera llevar a cabo un secuestro dentro de la cárcel es motivo de preocupación y alerta para las autoridades.
El cabo de la Policía Nacional, Nelly Echavarría Feliz, fue asesinado por Michael Deivi Ramírez en octubre de 2011, dejando a tres hijos en la orfandad. El tribunal lo encontró culpable de este crimen y lo condenó a 20 años de prisión por violación de los artículos 295 y 304 del código penal dominicano. El Ministerio Público liderado por el magistrado Wandy Ramírez Adames, solicitó esta condena durante el juicio que tuvo lugar en noviembre de 2012. La muerte del cabo Echavarría Feliz y el secuestro del coronel Bidó son eventos trágicos que han impactado a las fuerzas policiales y al sistema penitenciario en la República Dominicana.
El incidente en la cárcel del 15 de Azua, donde se produjo el secuestro del coronel Ricardo Bidó, pone de manifiesto la necesidad de mejorar las condiciones de seguridad en las cárceles dominicanas. La violencia en las prisiones y la posibilidad de que reclusos peligrosos como Michael Deivi Ramírez puedan llevar a cabo actos criminales dentro de las instalaciones penitenciarias son motivos de preocupación para las autoridades y la sociedad en general. Es importante implementar medidas efectivas para prevenir situaciones como esta y garantizar la seguridad de los funcionarios penitenciarios y otros reclusos en el sistema carcelario del país.
El secuestro del coronel Bidó por parte de Michael Deivi Ramírez también destaca la importancia de la rehabilitación y reinserción social de los reclusos para evitar la reincidencia delictiva. Es fundamental trabajar en programas de rehabilitación efectivos dentro de las cárceles para brindar oportunidades de cambio a los prisioneros y prepararlos para una vida fuera de la prisión. La prevención del delito y la reinserción social son pilares clave en la lucha contra la criminalidad y la violencia en la sociedad. Las autoridades deben enfocarse en programas de reinserción efectivos para reducir la posibilidad de que ex reclusos cometan nuevos delitos una vez liberados.
