El embarazo en adolescentes en la República Dominicana ha disminuido un 26,6% en el primer trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2023. Esto se debe a la implementación de programas de educación sexual integral y habilidades para la vida por parte de varias instituciones estatales. Durante enero y marzo se registraron 4,484 embarazos en adolescentes, 1,623 menos que el año pasado, cuando se contabilizaron 23,070 gestaciones en menores de edad. Seis provincias han mejorado sus cifras, especialmente aquellas priorizadas por la Política de Prevención y Atención a las Uniones Tempranas y el Embarazo en Adolescentes, como Puerto Plata, San Juan de la Maguana, Barahona, San Cristóbal, San Pedro de Macorís y Dajabón.
A pesar de que Dajabón continúa teniendo una de las mayores tasas de embarazo en edad temprana, ha experimentado una significativa disminución en comparación con años anteriores. En 2022, la provincia registró 199 embarazos de niñas y adolescentes, cifra que disminuyó a 110 en 2023, y en el primer trimestre de 2024 se presentaron 37 embarazos en este rango de edad. San Cristóbal, otra provincia priorizada por la PPA, también ha visto una reducción en sus cifras de embarazos adolescentes, pasando de 1,743 en 2022 a 708 en 2023, y registrando 289 en el primer trimestre de 2024.
El embarazo adolescente representa un costo de 245 millones de dólares al año -un 0,29% del PIB- para la República Dominicana, el país con la Tasa Específica de Fecundidad Adolescente más alta de América Latina. Datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas indican que seis de cada diez adolescentes que quedan embarazadas en el país no concluyen la educación secundaria. Además, se estima que 123 de cada 100,000 nacimientos de madres adolescentes resultan en mortalidad materna, lo que representa una grave pérdida para la sociedad.
Es importante destacar que la implementación de programas de educación sexual integral y habilidades para la vida ha contribuido a la reducción del embarazo en adolescentes en la República Dominicana. La sostenida tendencia a la baja de estas cifras demuestra que el trabajo conjunto de varias instituciones estatales está dando resultados positivos. Provincias como Puerto Plata, San Juan de la Maguana, Barahona, San Cristóbal, San Pedro de Macorís y Dajabón han logrado mejoras significativas en sus tasas de embarazo adolescente, lo que demuestra la efectividad de las políticas de prevención y atención a las uniones tempranas.
Es fundamental seguir fortaleciendo las estrategias de prevención de embarazo en adolescentes en la República Dominicana para garantizar un futuro más saludable y próspero para las niñas y jóvenes del país. La inversión en educación sexual integral, acceso a métodos anticonceptivos y apoyo psicosocial para las adolescentes embarazadas son clave para seguir reduciendo estas cifras. Asimismo, es necesario seguir trabajando en la eliminación de estigmas y tabúes relacionados con la sexualidad adolescente para promover una cultura de respeto, equidad y derechos sexuales y reproductivos.