Richard Gere, un ícono en el Hollywood de los años ochenta y noventa, ha llegado a los 75 años con una vida llena de causas solidarias y viviendo en Madrid con su tercera esposa, Alejandra Silva. Conocido por películas como American Gigolo, Un oficial y un caballero, y Chicago, Gere también es reconocido por su faceta humanitaria y su compromiso con diversas causas sociales, como la ayuda a migrantes en el Mediterráneo y el apoyo a fundaciones contra el sida y el cáncer infantil.
Nacido en Nueva York en una familia modesta, Gere destacó desde pequeño por su talento musical y su interés en la actuación. Abandonó sus estudios universitarios para enfocarse en el teatro, debutando en el cine en 1975. Su gran salto a la fama llegó con la película American Gigolo en 1980, seguida de éxitos como Un oficial y un caballero y Pretty Woman, que lo consolidaron como uno de los actores más atractivos de la pantalla grande.
A lo largo de su carrera, Gere ha demostrado su versatilidad en papeles diversos, recibiendo elogios por su actuación en películas como Sommersby, El doctor T y las mujeres, y Noches de tormenta. A pesar de su popularidad, solo logró un Premio Globo de Oro por Chicago en 2003, y en 2002 recibió un Óscar honorífico por su contribución a la industria cinematográfica. En 2007, fue galardonado con el Premio Donostia en el Festival de Cine de San Sebastián.
Además de su carrera actoral, Gere es conocido por su activismo en la defensa de los derechos humanos y el medio ambiente. Ha criticado la opresión en China y ha apoyado causas humanitarias a través de subastas benéficas. En 2019, su participación en el Open Arms de la ONG española generó controversia y llamó la atención sobre la situación de los migrantes en el Mediterráneo. Por su labor social y ecológica, ha recibido premios como el Premio Humanitario de Filadelfia y el Premio Alemán de Sostenibilidad.
Casado anteriormente con Cindy Crawford y Carey Lowell, Gere contrajo matrimonio en 2018 con Alejandra Silva, con quien tiene dos hijos. La pareja decidió mudarse a Madrid, donde Gere elogió la alegría y felicidad de los españoles y expresó su emoción por vivir fuera de Estados Unidos por primera vez. A pesar de su estatus de celebridad, Gere ha adoptado un perfil bajo en la capital española, disfrutando de la vida familiar y su pasión por el Real Madrid.