El club San Lázaro se proclamó campeón del Torneo de Baloncesto Superior Femenino del Distrito Nacional tras derrotar al club Mauricio Báez en el cuarto partido de la ronda final, dominando la serie 3-1. El torneo, en su edición número 38, contó con la participación de ambos equipos en búsqueda de la Copa Seaboard "Energía Limpia".
Las jugadoras de San Lázaro lograron imponerse con un marcador de 90-58 en el cuarto encuentro, donde Vanessa Bautista se destacó con un doble-doble de 25 puntos y 16 rebotes. Además, Yadira Polanco anotó 21 puntos y Angie Hodge agregó 19 puntos y 12 rebotes. Por su parte, en el equipo de Mauricio Báez, Génesis Evangelista anotó 14 puntos con cuatro rebotes, Jennifer Jiménez 13 y Karla Aquino consiguió nueve puntos.
La victoria de San Lázaro significó la obtención de la Copa Seaboard "Energía Limpia" en un torneo dedicado al ex entrenador de baloncesto William Ramos. La entrega del trofeo estuvo a cargo de Fernando Geraldino, gerente de Responsabilidad Social de la empresa Seaboard "Energía Limpia", acompañado de Junior Paez, vicepresidente de la Federación Dominicana de Baloncesto, y otros ejecutivos del torneo.
A pesar de que las lazareñas rompieron el dominio de localía en el cuarto partido, habiendo ganado dos encuentros en su sede previamente, Mauricio Báez se mantuvo como un fuerte rival a lo largo de la serie final. Ambos equipos demostraron su calidad y entrega en cada enfrentamiento, generando gran expectación entre los fanáticos del baloncesto en el Distrito Nacional.
El torneo fue organizado por la Asociación de Baloncesto del Distrito Nacional (Abadina), presidida por el coronel (PN) Diego Pesqueira, con Elías Reynoso liderando el Comité Organizador y Edwin Castillo a cargo de la coordinación general. El éxito del torneo fue evidente en la emoción y la competencia que se vivieron en cada partido, mostrando el talento y la pasión por el baloncesto femenino en la región.
La final del Torneo de Baloncesto Superior Femenino del Distrito Nacional fue un evento deportivo de gran relevancia que contó con la participación de dos equipos destacados como San Lázaro y Mauricio Báez. La competencia fue intensa y emocionante, culminando con la victoria de San Lázaro y la consagración como campeonas del torneo, dejando un legado de esfuerzo y dedicación en la historia del baloncesto femenino en la región.