La campaña de Kamala Harris reveló que más de 4 millones de latinos perderían su seguro médico si Donald Trump regresa a la Casa Blanca. Trump ha intentado en el pasado derogar la reforma de salud de Obama, lo que afectaría significativamente a la comunidad latina. Se prevé que las aseguradoras aumenten sus precios e incluso nieguen la cobertura a los pacientes con enfermedades preexistentes si Trump vuelve al poder, lo que resultaría en que el 20 % de los latinos perderían su seguro médico.
Además, los precios de los medicamentos podrían aumentar debido a los aranceles propuestos por Trump a los productos importados, lo que afectaría especialmente a los hispanos que ya tienen dificultades económicas para obtener sus medicinas. El límite de 35 dólares mensuales para la insulina pagada por los beneficiarios de ‘Medicare’ también estaría en riesgo si Trump regresa a la presidencia.
La comunidad latina se ve particularmente afectada por la diabetes, con una incidencia más alta que la media nacional, lo que aumenta la importancia del acceso a la insulina a precios asequibles. Otra preocupación relevante en materia de salud es el derecho al aborto, que podría estar en peligro en varios estados luego de la eliminación del fallo ‘Roe vs. Wade’ por la mayoría conservadora del Tribunal Supremo nombrada por Trump.
En contraste con Trump, Kamala Harris ha prometido luchar por un futuro en el que todos los estadounidenses puedan acceder a la atención médica que necesitan. La salud es un tema fundamental para los estadounidenses, según una encuesta reciente, siendo la economía el único tema más relevante. La preocupación por las propuestas de Trump y su impacto en la salud de los latinos ha llevado a la campaña de Harris a destacar los riesgos que implicaría su regreso a la presidencia en términos de cobertura médica.
Durante el debate contra Harris, Trump se mostró vago sobre sus planes de atención médica y se negó a dar detalles, aunque reiteró su intención de reemplazar la reforma sanitaria de Obama. Por su parte, J.D. Vance, compañero de fórmula de Trump, ha propuesto cambios que podrían hacer que las personas con enfermedades preexistentes paguen más por su atención médica. Harris, por otro lado, ha defendido la reforma de Obama y ha asegurado que se esforzará por garantizar que todos los estadounidenses puedan costear la atención médica que necesitan.