El tema de los extranjeros, principalmente haitianos, nacidos en la República Dominicana ha vuelto a ser noticia en la prensa nacional. La Junta Central Electoral (JCE) respondió a las denuncias del expresidente de la institución, Roberto Rosario Márquez, sobre la falta de Libros de Extranjería en la mayoría de los hospitales públicos, donde se deben inscribir los niños nacidos en el país de padres extranjeros no residentes.
La JCE presentó un informe sobre los nacimientos de dominicanos y extranjeros registrados entre enero de 2012 y agosto de 2023, indicando que se registraron 2,915,930 nacimientos, de los cuales 241,103 (8%) corresponden a extranjeros, sin especificar la nacionalidad. En 2023, se registraron más nacimientos de hijos de extranjeros, 29,945, mientras que en 2013 solo se registraron 6,308.
De los nacimientos registrados, 654,733 fueron en las Delegaciones de Oficialías, de los cuales el 82% son dominicanos y el 18% son extranjeros. La JCE afirmó que ha actuado de acuerdo a la Constitución en la adquisición de la nacionalidad dominicana y el registro de hijos de extranjeros nacidos en el país.
La Constitución establece que la nacionalidad dominicana le corresponde a varios grupos, incluyendo hijos de dominicanos, personas nacidas en territorio nacional, descendientes de dominicanos residentes en el exterior, entre otros. La Ley de Migración establece que los centros de salud deben expedir una Constancia de Nacimiento de color rosado para mujeres extranjeras sin documentos legales.
Roberto Rosario Márquez, expresidente de la JCE, ha destacado la importancia de implementar el Libro de Extranjería para el registro de nacimientos de hijos de extranjeros no residentes en la República Dominicana. Ha señalado que los hospitales públicos no están cumpliendo con esta normativa, lo que pone en peligro la existencia del país y la soberanía nacional.
La controversia sobre los extranjeros nacidos en la República Dominicana se ha intensificado luego de que Amnistía Internacional pidiera al presidente Abinader priorizar el respeto a los derechos humanos y poner fin a políticas migratorias "racistas" que afectan principalmente a los haitianos. Personalidades políticas y sociales han expresado sus opiniones al respecto, destacando la importancia de garantizar el registro adecuado de los nacimientos de extranjeros en el país.
