El sector agrícola en la zona fronteriza del país está experimentando estrés hídrico debido a la escasez de agua en provincias como Dajabón, Monte Cristi, Santiago Rodríguez, Elías Piña, Independencia, Bahoruco y Pedernales. Esta situación se debe al uso intensivo del agua en actividades agrícolas, lo que demanda una gestión cuidadosa de este recurso. La disponibilidad de agua en la región está influenciada por factores como el clima, el suelo, la vegetación y la ubicación geográfica, y su uso excesivo podría limitar el crecimiento económico.
En la zona fronteriza, el sector agrícola es el principal consumidor de agua, seguido por el consumo humano y el ecológico. La falta de agua potable es una preocupación, ya que más de 11,000 viviendas en la región no reciben el servicio, lo que representa un déficit en infraestructura para la captación, almacenamiento, conducción y distribución de agua para uso doméstico y agrícola. Además, se destaca que entre el 64% y 84% de los hogares prefieren almacenar agua debido a la falta de servicio continuo y a la disponibilidad de fuentes alternativas.
Para abordar esta problemática, el Gobierno ha implementado 25 proyectos de inversión pública en la zona fronteriza para mejorar el acceso al agua. Se destaca la importancia tanto del uso como de la disponibilidad del líquido y de las infraestructuras hidroeléctricas para el desarrollo productivo en estos territorios. Se busca evitar que los niveles de utilización del recurso superen su velocidad de renovación natural, lo que podría afectar el crecimiento económico de la región.
Se destaca la importancia de la gestión rigurosa del agua en la zona fronteriza para garantizar su disponibilidad y sostenibilidad a largo plazo. El estrés hídrico se produce cuando la demanda de agua supera la cantidad disponible en un período determinado, lo que podría tener impactos negativos en la productividad agrícola y en el bienestar de la población. Es fundamental implementar medidas de conservación y uso eficiente del agua para garantizar su disponibilidad para las actividades agrícolas, el consumo humano y el mantenimiento de los ecosistemas locales.
El Ministerio de Economía destaca la importancia de la gestión adecuada del agua en la zona fronteriza para evitar el estrés hídrico y garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos en la región. Señala que el consumo excesivo y poco sostenible del agua en el sector agrícola podría limitar el crecimiento económico y el desarrollo de la región. Es fundamental implementar medidas de conservación del agua, así como infraestructuras adecuadas para la captación y distribución del líquido, para garantizar su disponibilidad para todos los usuarios y para proteger el medio ambiente de la región.
