El comandante general del Ejército, mayor general Carlos Antonio Fernández Onofre, ha ordenado un aumento de tropas en las unidades responsables de proteger la franja fronteriza y las fuerzas especiales. Se distribuyeron 1,100 soldados recién graduados en diversas áreas, como parte de las medidas implementadas para reforzar la capacidad operativa en la zona límite. Las unidades reforzadas incluyen el Décimo Batallón de Infantería en Dajabón, el Primer Batallón de Infantería en Elías Piña, la Fortaleza Militar "El Rodeo" en Jimaní y el Décimo Sexto Batallón de Infantería en la Fortaleza Enriquillo en Pedernales, entre otras. También se han aumentado las tropas del Batallón de Comandos y el 6to. Batallón de Cazadores, así como las demás Brigadas de Infantería en todo el territorio nacional.
Este incremento de tropas demuestra el compromiso del Ejército de garantizar la soberanía e independencia de la nación, fortaleciendo la seguridad en todas las áreas fronterizas y asegurando un ambiente seguro y estable para las comunidades locales. Las tropas desplegadas tienen la responsabilidad de proteger diferentes regiones a lo largo de la frontera, desde el norte hasta el sur del país. Con esta medida, se busca prevenir amenazas externas y velar por la seguridad de los ciudadanos en estas zonas limítrofes.
La decisión de reforzar las unidades militares en las zonas fronterizas se da en un contexto de preocupación por la seguridad y estabilidad de las regiones cercanas a los límites del país. Con el aumento de tropas, se busca disuadir cualquier intento de intrusiones o actividades ilícitas en estas zonas, protegiendo así a la población y fortaleciendo la presencia del Ejército en áreas estratégicas de la frontera. Esta medida también busca garantizar un entorno propicio para el desarrollo de las actividades cotidianas de las comunidades locales.
Además de los soldados recién graduados, se han reforzado las unidades de fuerzas especiales como el Batallón de Comandos y el 6to. Batallón de Cazadores, con presencia en diferentes regiones del país. Estas fuerzas especiales tienen la tarea de realizar operativos especiales y responder rápidamente a situaciones de emergencia en cualquier parte del territorio nacional. Este aumento de tropas en las unidades de fuerzas especiales complementa la presencia de soldados en las áreas fronterizas, fortaleciendo así la capacidad de respuesta del Ejército ante cualquier eventualidad.
En definitiva, el incremento de tropas en las áreas fronterizas y unidades de fuerzas especiales representa un paso importante en el fortalecimiento de la seguridad y defensa del país. Con esta medida, el Ejército busca reforzar su presencia en áreas estratégicas y garantizar la protección de las comunidades locales, así como prevenir cualquier amenaza externa que pueda poner en riesgo la soberanía e integridad territorial de la nación. Esta acción refleja el compromiso de las autoridades militares de seguir velando por la seguridad de la población y mantener un ambiente seguro y estable en las zonas fronterizas.