El presidente de la República, Luis Abinader, inauguró un Centro de Interdicción Migratoria en la provincia Dajabón para acoger a extranjeros indocumentados antes de su repatriación. El director de Migración, Venancio Alcántara, explicó que el centro cuenta con salones separados para hombres, mujeres y niños, así como oficinas para brindar servicios de migración. La estancia de los extranjeros en el lugar será de 24 horas o menos antes de su deportación. Además, se instalará una oficina de Extranjería en la misma edificación para ofrecer servicios de certificación y documentación, evitando que los extranjeros tengan que viajar a otras ciudades en busca de estos servicios.
Alcántara destacó la importancia de inaugurar este Centro de Interdicción Migratoria y otros cinco centros similares para proteger la soberanía del país, garantizar la seguridad de los ciudadanos y aplicar las leyes migratorias de manera justa y efectiva. Desde el año 2016 hasta el 2020, la institución de Migración deportó a su país natal a 226,486 inmigrantes, mientras que desde el 2020 hasta junio del presente año, se deportaron a 1,260,686 indocumentados. El sacerdote Roberto Guzmán, encargado de bendecir el nuevo centro de migración, destacó la importancia de tratar a los inmigrantes con dignidad, respeto y cariño, incluso si van a ser deportados, para no violar sus derechos fundamentales.
Guzmán también aplaudió el uso de control biométrico para identificar a quienes entran y salen del país, pero enfrente al presidente Luis Abinader la preocupación por la gran cantidad de indocumentados que entran al país sin ningún control. El sacerdote instó a prestar más atención a esta situación para no poner en peligro la patria, mencionando la cantidad de inmigrantes que entran al país de manera ilegal, incluso pasando por los controles de seguridad. Es importante respetar los derechos de los inmigrantes y garantizar un tratamiento digno y humano, independientemente de su situación migratoria. La inauguración de este Centro de Interdicción Migratoria busca reforzar la aplicación de las leyes migratorias y proteger la seguridad del país.
El director de Migración enfatizó que la deportación de inmigrantes se realiza respetando sus derechos y de manera justa, cumpliendo con las leyes migratorias vigentes. El Centro de Interdicción Migratoria en Dajabón funcionará como un punto de recepción y procesamiento de extranjeros indocumentados antes de su deportación, brindando servicios esenciales para facilitar este proceso y evitar traslados innecesarios a otras ciudades. La presencia de oficinas de Extranjería dentro de la misma edificación permitirá a los extranjeros acceder a servicios de certificación y documentación sin tener que desplazarse a Santiago o Santo Domingo.
El sacerdote Guzmán, al bendecir el centro de migración, hizo un llamado a respetar los derechos fundamentales de los inmigrantes y tratarlos con dignidad y cariño, a pesar de su situación migratoria. La utilización de tecnologías como el control biométrico para identificar a los viajeros es una medida positiva para asegurar la seguridad del país, pero es necesario reforzar los controles en las fronteras para evitar la entrada ilegal de indocumentados. La colaboración entre las autoridades migratorias y la sociedad civil es fundamental para garantizar un trato justo y humano a los inmigrantes, protegiendo la soberanía y la seguridad nacional. La inauguración de este centro de interdicción migratoria es un paso importante en el fortalecimiento de las políticas migratorias y la protección de los derechos de los ciudadanos.