La doctora Clevy Pérez, ex presidenta de la Sociedad de Infectología, ha expresado su preocupación ante los posibles casos de ántrax en Haití, indicando que es necesario tomar medidas en cuanto al trasiego de alimentos para prevenir la propagación de la enfermedad. Por otro lado, el doctor Eladio Pérez, viceministro de Salud Colectiva del Ministerio de Salud Pública, ha confirmado que los casos en Haití son considerados como sospechosos, y se han activado los protocolos correspondientes en el país para vigilar y tratar la enfermedad.
El ántrax es una enfermedad bacteriana causada por un bacilo Gram positivo que ha sido uno de los primeros microorganismos patógenos descritos en la historia. La bacteria se encuentra en el suelo en forma de esporas, pudiendo sobrevivir durante muchos años, y afecta principalmente a mamíferos, como el ganado. El ser humano puede contaminarse de forma excepcional a través de la inhalación de esporas, motivo por el cual el ántrax se encuentra en la lista de agentes de bioterrorismo, generando alertas periódicas en países como Estados Unidos.
El contagio del ántrax puede ocurrir de varias formas, como la inoculación cutánea al manipular suelo o animales contaminados, lo cual produce un cuadro menos severo de la enfermedad. También puede transmitirse por vía gastrointestinal al ingerir alimentos contaminados, así como por vía parenteral, especialmente asociado a la inyección de heroína contaminada. A pesar de que la enfermedad ha disminuido a nivel global debido a las mejores condiciones de higiene, se mantiene la preocupación por posibles casos de bioterrorismo.
En cuanto a la prevención del ántrax, es importante tomar medidas de higiene en la manipulación de suelos y alimentos, así como en la prevención de heridas cutáneas al estar en contacto con animales potencialmente contaminados. Asimismo, es fundamental evitar el consumo de alimentos contaminados y mantener una adecuada higiene en los lugares de trabajo. A nivel global, se han implementado medidas de control y vigilancia para detectar posibles brotes de la enfermedad, así como para prevenir casos de bioterrorismo.
La especialista destaca la importancia de mantenerse informado sobre los riesgos y medidas de prevención relacionadas con el ántrax, así como de acudir a los centros de salud ante la presencia de síntomas sospechosos. La colaboración entre diferentes entidades de salud y organismos internacionales es fundamental para garantizar una respuesta efectiva ante posibles brotes de la enfermedad. En este sentido, la prevención, el control y la vigilancia son clave para evitar la propagación del ántrax y proteger la salud pública. Es necesario continuar promoviendo la concienciación y la educación sobre esta enfermedad, así como mantener la colaboración entre países para garantizar la salud y seguridad de la población a nivel global.