John Mayall, el cantante y músico considerado como el padre del blues británico y mentor de legendarios guitarristas como Eric Clapton, Peter Green y Mick Taylor, falleció a los 90 años. Su muerte fue anunciada en su cuenta de Instagram, donde se informó que Mayall murió pacíficamente en su casa de California rodeado de su amada familia. Mayall fundó la banda The Bluesbreakers, referente del blues en los años 60 y 70, y en la que participaron músicos como Eric Clapton, Mick Fleetwood, Jack Bruce, John McVie, Peter Green y Mick Taylor, quien trabajó con los Rolling Stones durante cinco años.
Antes de su fallecimiento, John Mayall se enteró de que finalmente ingresará al Salón de la Fama del Rock and Roll. El músico tuvo seis hijos, cuatro de ellos con su primera esposa Pamela, y dos con Maggie Parker, quien también fue intérprete de blues. A lo largo de su carrera, Mayall nunca tuvo un gran éxito comercial, nunca ganó un Grammy y la revista Rolling Stone nunca le dedicó un artículo. A pesar de ello, su influencia en el blues británico y su legado como mentor de destacados músicos lo convierten en una figura fundamental en la historia de la música.
John Mayall enfrentó problemas de salud que lo llevaron a poner fin a su carrera de giras musicales. Su legado como músico influyó en varias generaciones de artistas de blues y rock, y su trabajo con The Bluesbreakers le valió el reconocimiento de la crítica y de sus compañeros de la industria musical. La noticia de su fallecimiento dejó consternados a sus seguidores y colegas, quienes lamentaron la pérdida de uno de los grandes guerreros de la música en vivo.
La música de John Mayall y su contribución al blues británico seguirán siendo recordadas y reverenciadas en la historia de la música. Su pasión por el blues y su habilidad para descubrir y potenciar el talento de jóvenes músicos lo convierten en una figura legendaria en el mundo del rock. Su influencia perdurará en la música de artistas contemporáneos que han encontrado en su trabajo una inspiración y un modelo a seguir. La noticia de su fallecimiento deja un vacío en la industria musical, pero su legado perdurará en la memoria de sus seguidores y en la historia del blues británico.