El Departamento de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura ha anunciado el inicio de la veda de cultivos hospederos de la mosca blanca y el thrips en las provincias de Santiago, Dajabón, Valverde y Montecristi. Esta medida tiene como objetivo reducir la incidencia de estas plagas y evitar infestaciones en otros cultivos de estas demarcaciones. La veda estará vigente desde el 01 de julio hasta el 30 de septiembre de 2024 en las zonas Norte y Noroeste. Los productos vedados incluyen tomate, berenjena, melón, sandía, pepino, molondrón, ajíes, auyamas y algodón, así como el tabaco en todo el territorio nacional, excepto en la provincia de Azua.
La resolución RS-MARD-2024-9 fue consensuada con todas las asociaciones de productores y agricultores independientes a nivel nacional, quienes se comprometieron a cumplirla de manera fiel. Esta medida también tiene como objetivo garantizar las condiciones fitosanitarias de los campos y la implementación efectiva de los controles biológicos en todo el país, para asegurar la seguridad alimentaria de la República Dominicana y sus exportaciones. Aquellos que infrinjan la disposición estarán sujetos a sanciones legales.
Para sustituir los cultivos vedados, se recomienda sembrar maíz, sorgo, yuca, plátano, guineo, rulo, repollo, cebolla, apio, bagaña, cundeamor, lechosa, vainitas y musú, así como cualquier otro cultivo que no sea hospedero de mosca blanca o thrips. Asimismo, se informa que la veda en las zonas Sur, Central y Suroeste concluirá el 30 de noviembre, por lo que se insta a respetar las disposiciones establecidas.
Esta medida es parte de los esfuerzos del Ministerio de Agricultura para proteger los cultivos y garantizar la seguridad alimentaria en la República Dominicana. La prohibición de cultivos hospederos de mosca blanca y thrips es una estrategia para controlar la incidencia de estas plagas y prevenir su propagación a otros cultivos. El cumplimiento de esta veda es fundamental para preservar la sanidad de los campos y promover prácticas agrícolas sostenibles en el país.
Se espera que los productores y agricultores acaten estas disposiciones y busquen alternativas de siembra que no estén vedadas durante el período establecido. La colaboración de todos los actores involucrados en la producción agrícola es esencial para garantizar el éxito de estas medidas fitosanitarias. La implementación efectiva de controles biológicos y el respeto a las vedas contribuirán a proteger la agricultura dominicana y mantener la calidad de los alimentos producidos en el país.
En conclusión, la veda de cultivos hospederos de mosca blanca y thrips es una medida preventiva para evitar infestaciones en los cultivos y proteger la seguridad alimentaria en la República Dominicana. Los productores y agricultores deben respetar estas disposiciones y buscar alternativas de siembra durante el período de veda. El compromiso de todos los actores involucrados en la agricultura es fundamental para garantizar la sanidad de los campos y promover la sostenibilidad en el sector agrícola del país.